viernes, 28 de marzo de 2003

Exposición LUIS ARDEVÍNEZ. Segovia


ESCULTURA, PINTURA Y OBRA GRÁFICA.


Los poblados cuadros de Luis Ardevínez están habitados por una animada suma de elementos plásticos de notable atrevimiento y originalidad, que superan un simple collage. La madera, tratada a veces con intencionada brusquedad, es siempre protagonista de estas creaciones, en sus contenidos y en sus continentes.

Me refiero a los marcos, que casi siempre forman parte del todo. Ardevínez, además de colgar cuadros que son algo así como cajas contenedoras de sugerentes elementos, expone unas peculiares esculturas de madera pintada, respetando casi la forma original de la pieza, y realizando un guiño al espectador entre anif y primitivo, a irónico y cáustico. Porque la ironía  está presente en casi todas estas creaciones escultóricas y, por supuesto, en los cuadros una inquietante ingenuidad bastante bien estructurada.

También, Luis Ardevínez nos enseña en esta exposición unas "cajas-poema" que parecen ser el empeño más poético y trascendente de sus trabajos, y que a mí me parecen literarias y retóricas, y con una aportación alo plástico. Con mucho, yo prefiero esas dos composiciones tituladas "Pintor" y "Pintora", poseedoras de gracia, fuerza e inventiva; prefiero sus "Bañistas", en playas de rugosa madera, y el recuerdo nostálgico de la vida irresponsable infantil plasmada en el cuadro denominado "La Peonza", realizado con muy pocos elementos, y de gran esfuerzo de síntesis. A veces, la alegría de la fiesta y de la vida brinca y desborda al artista , como por ejemplo en las cajas llamadas "Tatachín..." y "Jardín de infancia". De las esculturas resaltó "El Pianista", una figura espigada, con encanto y carga crítica.

En resúmen, este creador plástico madrileño se expresa de forma propia , definida, original y desenfadada. Es una obra de notable interés, de la que él a buen seguro expurgará en su futuro (pocos) excesos de barroquismo innecesario, hiedra que resta algo a la brillante propuesta.

Texto: Antonio Madrigal (EL ADELANTADO DE SEGOVIA, 17/04/2003).

viernes, 21 de marzo de 2003

Exposición BELÉN ÁLVAREZ. Madrid


OBJETOS LUMINOSOS.

Belén Álvarez lleva años dedicada a una actividad muy personal, la construcción de objetos luminosos. Pintora de sutiles bodegones y retratista, compagina estas actividades con lo que ha resultado ser su más firme vocación: la transparencia.

En las 21 obras que presenta ahora, predomina un tema, los fuegos artificiales y una sensación, la noche. El conjunto de piezas corresponde a dos series. La de ejecución más reciente, basada en una visión más intimista de los fuegos artificiales, y otra anterior que trata de la naturaleza, de los ámbitos más recónditos, a veces microscópicos, de la vida.

Belén viene experimentando con diversos materiales y técnicas en busca de un mejor resultado expresivo y también, no olvidemos el aspecto material de obras, una mejor construcción. Las que ahora presenta son cajas luminosas de formato y tamaños diversos.

En su obra destaca la elegancia del trazo y la sensibilidad para el color. Color que la luz misma se encarga de revelar por transparencia,  adentrándose y adentrándonos en el misterio de los materiales y pigmentos que atraviesa. Se trabaja con la luz y conviene a la penumbra. Es luz que no necesita justificaciones, cajas que dejaron hace mucho de ser  lámparas, si alguna vez lo fueron, y parecen linternas mágicas que se expresan plenamente en una discreta sombra.

Con Belén la luz se refugia en la materia y desde allí nos propone su misterio. La sensibilidad de la artista consigue que la luz revele matices, gradaciones, contrastes y cierta magia. Una obra que es pintura, escultura, fotografía y algo más que cuesta definir y es lo que presta a estas cajas su mayor interés. Hay en ellas una indudable, pero bien asimilada, influencia oriental, Alguna de las figuras, tanto si están hechas con materiales naturales, hojas o flores secas, como si están realizadas por medios puramente pictóricos, nos recuerdan ideogramas.

En la serie Fuegos artificiales, la artista juega a detener y retener su luz, tan repentina y efímera, en trazos esenciales: una gota de luz puede bastar para evocar el movimiento, la explosión. Huye del color y el brillo excesivos, su aproximación es sosegada y ha sacrificado con sabiduría la espectacularidad que habría dominado el conjunto y perjudicado el equilibrio que le permite hablarnos reposadamente.

Penumbra, misterio, unas cajas que invitan a ser contempladas con detenimiento  y que sin duda crean un espacio muy sugerente.

Texto: Rafael Colorado.

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OBJETOS LUMINOSOS

En estos objetos son protagonistas las hojas secas, las conchas y las piedras. Con estos materiales confecciono collages que recubro con fibra de vidrio para darles solidez y compacidad. También utilizo la resina de poliéster como soporte o contenedor de los mismos. Están construidos artesanalmente, sin intención de hacer prototipos, y cada objeto es pieza única y ha supuesto un problema diferente.

Los denomino “objetos luminosos” porque su función no es servir a la lectura ni a la creación de ambientes, aunque si esto se consigue por añadidura, para mí es una satisfacción. Mi propósito fundamental es iluminar materias traslúcidas para mejorar su visión. La luz interior nos descubre aspectos casi microscópicos, por ejemplo en el intrincado encaje de las nerviaciones secundarias de las hojas o insinuándonos la cavidad espiral de las conchas a las que nos asoma.

La luz se convierte aquí en el factor lúdico, tal vez no imprescindible, pero descubridor de matices de color, transparencias, diseños y estructuras ocultas. Esta iluminación no es casual ni aleatoria, no ha sido añadida después, sino que desde el principio trabajo con ella y define la composición.

Los diseños son alusiones, copias y combinaciones de determinadas estructuras/arquitecturas anatómicas. Así, las estructuras de las escamas de los peces y los reptiles, y a las plumas de pájaro, están recreadas por el hombre en antiguas cotas de malla y tejados de las casas, o en esas formas tubulares que construyen las larvas acuáticas de los tricópteros uniendo diversos materiales en su entorno.

Cuanto más nos adentramos en los mundos submicroscópicos, más los vemos como sistemas de estructuras y componentes inseparables interrelacionados de los que el hombre forma parte íntegra, no sólo en sí mismo, sino en cualquiera de sus manifestaciones físicas, intelectuales o instintivas.

Texto: Belén Álvarez.

sábado, 1 de marzo de 2003

Exposición SANTI MORATÓ. Sitges


REFLÈXES DE SANTI MORATÓ A PAU D'ARARA.

La galeria de arts aplicades Pau d'Arara ofereix en el seu espai d'exposició l'obra de Santi Morató, artista nascut a Castelví de la Marca. Reflèxes és el títol generic d'aquesta mostra que reunieix treballs sobre diversos suports emtre els que destaca la utilizació de resines sintètiques que contenen imatges del cos humà.

Format a l'escola Massana de Barcelona Santi Morató s'especialitzá en les tècniques de gravat i procediments pictòrics, ha participat en tallers de teatre i ha realizat un curso de motllos en guix a l'escola Arsenal. Ha col.laborat amb l'Institut d'Estudis Penedesencs realizant les il.lustracions dels premis literaris Sant Jordi 1988. Santi Morató ha traballat durant els darrers tres anys en el taller d'escultura i cerámica de Julio Bonobasa. La seva activitat artística s'ha vist reconeguda en diversas mencions en certàmens de pintura i escultura (jove pintura Galeria Anquinís de Reus 2000) i també ha estat un dels fundadors de l'associació T-45 de Barcelona. Darrerament ha participat en la II Bienal d'art de San Pere de Riudebitlles 2002 i ha estat primer premi de ceràmica en la mostra artística de Sant Raimon de Penyafort (Santa Margarida i els Monjos) en l'edició 2002-2003.

En colaboració amb Xavier Bartumeus i J. L. Padrina van muntar l'exposició "Les Troballes del Dr. Figuerola" a l'espai Agustí Massana del Poble Espanyol de Barcelona, mostra que després es va presentat a la Sala Trinitaris de Vilafranca del Penedès.

Santi Morató ha portat a la Sala d'exposició de Pau d'Arara els darrers treballs artístic que podrien dividir en dues categories, els pictorics i els escultorics. La primera divisió conforma un apartat on la image pictòrica remet als records del viatge a África (Senegal) i conté recursos tècnics que van més enllà de la pintura pròpiament dita, l'additament de fustes i altres materials utilizats a manera de collage en són el resultat d'aquesta recerca. En el segon apartat, l'escultòric, l'artista treballa amb resines sintètiques transparents que contenem imatges fotografiques o trossos de metall.

La superposició i la simultaneïtat d'imatges, així com la delimitació, a voltes superada o transgredida composa un món propi de gran potencial poètic. Les mans o el cos en moviment són dues imatges que l'artista treballa en profunditat.

Així doncs l'obra d'aquest artista penedesenc destil.la la imatge transformant-la en reflex, creant espais de transparència i opacitat, jugant amb les sensacions de liquidesa aqüàtica i solodesa fèrria. I aquí podríem fer una extrapolaciódel treball d'aquest jove artista amb la col.lecció que es conseva al Cau Ferrat en la qual Santiago Rusiñol va voler reunir les fràgils creacions de cristall i vidre amb la contundència dels ferros forjats.

Texto: Isidre Roset i Juan (L'ECO DE SITGES / 8 de març DEL 2003).

http://santimorato.blogspot.com.es/

http://www.zigordisseny.com/project/santi-morato/?lang=es